Su dirección se le encomendó a Valentín R. González, hombre perteneciente a una nueva generación de realizadores que nació al estallar la Guerra Civil, y uno de los cineastas que disfrutó de más crédito en la primera etapa de producción del SIE; confianza que le sería retirada más tarde.
El film trata sobre un grupo de niños (nueve en los papeles principales y 150 de comparsas) que consiguen que se perdone la vida al padre de uno de ellos, acusado de espía nacionalista, al tiempo que logran también la concienciación de este niño rico que sentía, como su padre, un gran desprecio por las gentes pobres.
Valentín R. González, que era también autor del guión, definía así el tema de la película: "El contraste de la educación de los niños entre la vida de ayer y hoy".
No hay comentarios:
Publicar un comentario